Nota: ESTRENAMOS NUEVA FORMA DE ANALIZAR LOS JUEGOS.
Gráficos:
El apartado artístico del juego es sin lugar a duda alguna uno de los mejores que ha dado la historia de los videojuegos. Simulando escenarios y personajes dibujados a lápiz se nos presentan fases increíblemente variadas y adornadas con efectos gráficos que para la época dejan con la boca abierta, simulando escenarios en 2.5 D y además con sorprendentes efectos tridimensionales.
La variedad de enemigos y su diseño es igualmente digno de aplauso. Algunos resultan divertidos en su apariencia y otros imponen con un desproporcionado tamaño. Además el chip FX de Super Nintendo dotaba a los personajes en pantalla de una propiedad elástica increíble. Algunos enemigos simulan estar hechos de goma y se contraen y expanden sin problema alguno sorprendiendo al jugador con movimientos y patrones de ataque extremadamente originales, todo aprovechando esta genial técnica.
En definitiva, podríamos decir que el apartado artístico de este juego es prácticamente perfecto, buscar un error en el apartado gráfico de esto juego es una tarea titánica y prácticamente imposible.
Nota Gráficos: 100 %
Música:
Es magistral el trabajo realizado en este apartado, el juego consigue una calidad sonora impresionante en todos los sentidos, con melodías envolventes y complejas que consiguen que nos olvidemos de que no hay instrumentos reales detrás de las mismas. Además es digno de elogio el trabajo a la hora de valorarlo en el contexto jugable, con melodías que acompañan perfectamente a la situación en marcha. Escuchad por ejemplo como el siguiente tema evoca misterio y tensión, adornando complejos castillos.
O como el siguiente tema evoca una tonada más alegre para acompañar la marcha por un campo de flores.
Además, increíble lo cuidado que llega a estar el apartado musical en los menús, y es que la tonada que suena en la pantalla de selección de fase varia conforme avanzamos, añadiendo instrumentos sobre la misma base musical, enriqueciendo el tema. Como punto negativo, la banda sonora es ciertamente escasa, es decir, no existe una enorme variedad de temas y, por ejemplo, los temas expuestos aquí arriba se repiten en casi todos los mundos que visitamos. Un punto negro en un apartado casi perfecto.
Nota Música: 95%
Jugabilidad:
El juego rompe esquemas, la jugabilidad que Mario llevaba practicando desde la primera entrega de la serie Bros. tocaba a su final y era sustituida por un representante muy superior. Yoshi es muchísimo más versatil que Mario, puede saltar, revolotear, engullir y escupir enemigos o convertirlos en huevos y lanzarlos con distintos ángulos, haciéndolos rebotar en las paredes o cual piedra sobre el agua avanzar a saltos hacía su objetivo. Además puede transformarse en multitud de vehículos: Helicóptero, Coche, Submarino, Excavadora, Tren... El fontanero de Nintendo solo gana protagonismo al tocar una estrella, esto lo convierte en invencible y le permite correr por las paredes y flotar.
A la hora de morir, hay un par de formas posibles que seguramente todo jugador sufra a lo largo del periplo de Yoshi... Al chocar contra un enemigos nuestro dinosaurio no muere, pero pierde al bebé Mario que carga sobre sus espaldas (y pasa a encerrarse en una burbuja) y debe recuperarlo en determinado tiempo, el cual viene condicionado por la cantidad de mini-estrellas que hayamos recogido a lo largo de la etapa. Máximo 30 segundos, empezamos cada fase con 10. Si el tiempo se agota y el bebé sigue flotando en su burbuja sin que Yoshi haya sido capaz de recuperarlo el juego toca a su final. Si Yoshi cae por un barranco muere, si entra en contacto con algo puntiagudo a fuego más de lo mismo. Como veis, hay menos formas de morir que en un Mario ordinario y aún así el juego no pierde ni un atuso de reto. El inteligentísimo diseño de niveles pone a prueba los reflejos del jugador así como su capacidad de observación, y es que este no es el típico Mario y los niveles no son sólo lineales, sino que algunos son abiertos y de tamaño considerable. Los castillos con sus puzzles, llaves e incluso algún que otro minijefe son dignos de cualquier Zelda en diseño.
La variedad de situaciones es además sobrecogedora, desde volar sobre globos hasta esquiar en la montaña o huir de un Chop gigante, incluso avanzar por un nivel completamente borrachos por el contacto con una especie de espora, viendo como nuestro personaje pierde constantemente el equilibrio y el mundo a su alrededor se distorsiona, adaptando la mismas plataformas formas imposibles que dificultan nuestro avance por la fase. Además, para completar el 100% de la fase son necesarias tres condiciones: Acabar con 30 segundos en el marcador, reunir 5 Flores escondidas en las fases y reunir 20 monedas rojas camufladas entre las originales. Para ayudarnos contamos con un menú donde podemos guardar objetos que conseguimos o bien en los escenarios completando algún minijuego, o bien en la ruleta al final de fase.
Los niveles están diseñados para ser explorados, y completar el juego en su totalidad es toda una odisea. Los jefes son seguramente lo mejor en términos jugables que ha conocido la saga Mario, tan pronto están luchando contra una gelatina en un reto contrarreloj como en la tripa de una bestia luchando por salir.
En definitiva, Yoshi´s Island es una sorpresa jugable continua y uno de los mejores plataformas en 2D de la historia en ese apartado.
Nota Jugabilidad: 100%
Historia y Duración:
La trama no tiene especial ciencia, Kamek trata de secuestrar a Mario y Luigi siguiendo una profecía que augura que se convertirán en enemigos mortales de los koopa y su rey, Bowser. Estos están siendo custodiados por la Cigüeña y conducidos a su hogar cuando esta es atacado y Luigi secuestrado, Mario sin embargo cae sobre la isla de los Yoshi´s que comienzan su periplo para encontrar la forma de llegar al mundo de los koopa y recatar a Luigi, deteniendo además los planes de Kamek y Bowser.
La trama principal bien puede durar unas 5 horas o incluso 10 y sacar el 100% del juego es una odisea de prácticamente 40 horas si no somos especialmente dotados con los mandos, desde luego de 20 no baja, una cantidad muy considerable dentro del género.
Son 6 mundos de 8 fases cada uno, con una fase extra a mayores. Un total de 54 fases a las que se les suman otras 6 en su versión de Game Boy Advance. 60 fases en total, con mecánicas sorprendentemente variadas más minijuegos bien diferenciados. La pega es que para desbloquear todo esto es necesario un gran trabajo por parte del jugador, pues se exige completar cada nivel de forma perfecta y esto resulta desquiciante e incluso cansino.
Nota Historia y Duración: 95%
Conclusión:
Estamos al que es uno de los mejores plataformas en 2D de la historia y quizás el representante más original y mejor acabado de toda la historia de Mario en esta dimensión. Es una obra maestra atemporal que todo jugador debería probar, no hay excusa posible pues en vuestras 3DS lo tenéis, y si no hay esta el remake en Game Boy Advance o incluso su versión orginal.
97,5 %